En el pasado, los humanos y la naturaleza coexistieron en gran armonía. En aquellos días, la superviviencia de la humanidad dependía de su conexión con la naturaleza. Las personas se conectaban con la naturaleza en un nivel mucho más personal porque era integral con su propia existencia.

Hoy en día, las personas experimentan una gran desconexión con la naturaleza, que nos está separando de nuestra propia esencia. Si esta condición persiste, será lo que condene a la humanidad. Esta condición obliga a tomar medidas inmediatas y sustanciales.

Cuando uno despierta a esta verdad, uno naturalmente se hace sensible comienza a experimentar unidad con la naturaleza. Cuando tú apoyas la naturaleza, la naturaleza te apoya a ti.

Lo que le sucede a los animales en los océanos, nos sucede a nosotros, hombres y mujeres.

Lo que sucede a los bosques, nos sucede a nosotros en nuestros cuerpos, pues nuestros cuerpos son como árboles y están hechos de la misma tierra. ¿No son acaso formas de barro en movimiento provistas con inteligencia?

Un esfuerzo consciente de sanar la Tierra se manifestará como la sanación final para nuestros cuerpos.

En la medida que el árbol que plantaste crece, tú también crecerás en todos los aspectos.

- Sri AmmaBhagavan